ETAPA 11: HACIA JODHPUR (RANAKPUR)

Hoy nos íbamos de Udaipur, a las 8:30 nos esperaba Raj, nuestro nuevo conductor, para iniciar el viaje por el Rajasthan. Nos estaba esperando a la puerta del hotel, pero no podía venir con nosotros porque tenía un ojo mal por culpa de un insecto de la zona de Kahuraho, así que nos presentó a Kamal, el que sería nuestro conductor, y con el que pasamos buenos ratos durante nuestro viaje. Le pagamos a Raj el viaje y quedamos en que nos veríamos en Jaipur, su ciudad, porque nos invitaba esa noche a cenar con su familia. Nos habìamos decidido por Raj porque nos ofrecía un buen precio y porque además hablaba español pero estuvimos estupendamente con Kamal, que solo chapurreaba algunas palabras pero era un chaval majísimo con el que hicimos muy buenas migas.

Como una de las cosas que ibamos a ver era Ranakpur y el templo no abría hasta las 12 del mediodía nos desvíamos para visitar la fortaleza de Kumbhalgarh, una de las más grandes del Rajasthan. El camino en sí ya fue espectacular, porque íbamos siempre ascendiendo por una zona preciosa muy verde y frondosa. La lástima fue quue cuando llegamos a la fortaleza, que es enorme, había una espesa niebla que hizo que no pudieramos contemplar unas estupendas vistas de toda la zona.

P1000523P1000524 P1000528 P1000529

Seguimos el viaje y a eso de las 12:30 llegamos a Ranakpur, que como es un templo jainista no se puede entrar en él con ninguna prenda de cuero, ni tampoco con pantalón corto los hombres ni falda que no llegue hasta los tobillos las mujeres. De todas formas se puede alquilar en las taquillas un pantalón para ponerse y salir del apuro. Ranakpur es una auténtica pasada, columnas y más columnas talladas de mármol blanco y que forman un lugar mágico, con elefantes de mármol y techos tallados con unos detalles impresionantes. Había bastantes turistas, pero todo el mundo estaba silencioso, parecía que a todos les había impresionado el lugar.P1000556.1P1000563P1000533P1000555P1000557P1000545P1000556

Cuando salimos Kamal nos llevó a comer a un restaurante cercano, donde ya se iban un grupo de españoles que acababan de comer. Era buffet y no es que hubiera mucha variedad, aunque como iban occidentales tenían ¡patatas asadas!, eso sí, con monda. Mientras comíamos llegó otra pareja de chicos españoles y estuvimos un rato charlando con ellos. El chico llevaba fatal lo de la comida porque le había producido llagas en la boca y ya no sabía que comer para no ponerse peor con el picante.

Después de comer, seguimos hacia Jodhpur, fue una auténtica paliza porque aunque no había demasiados kilometros de distancia la carretera estaba muy mal y estaba llena de camiones, con lo que tuvimos que ir casi a 40 km/hora todo el camino. Llegamos a las 19:30 y ya era noche cerrada, encima nuestro alojamiento (Mandore guest house) estaba fuera de la ciudad, a 7 km, y tuvimos que dar unas vueltas hasta dar con él. Son unos coquetos bungalows (35 euros la noche), con un bonito jardín, aunque lo malo es que quedaba fuera de la ciudad, así que cenamos en el pequeño restaurante y quedamos con Kamal para el día siguiente.

Deja un comentario